martes, 8 de mayo de 2012

CUEVAS DE CAMUY


Fueron descubiertas en la decada del 50 por un grupo de especialistas
Sistema de Cavernas del Río Camuy, ubicado en el corazón de la Región Kárstica, el cual es conocido a nivel internacional como uno de los de más impresionantes dimensiones, belleza y espectacularidad. Posee unas particulares características, entre las cuales sobresalen sus entradas amplias y escénicas, sus pasillos y salones de gran volumen y extensión, y su caudal de agua subterránea transformado en el Río Camuy. Corriente de agua que hoy día es considerada como uno de los ríos subterráneos más caudalosos de¡ mundo.






Los miembros de la Sociedad Espeleológica de Puerto Rico y espeleólogos de otros países, tales como Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, España, Dinamarca, Noruega y Australia, han logrado explorar unos diez (10) kilómetros de los dieciséis (16) que se estima que tiene la longitud de este Sistema de Cavernas.
En la superficie de parte de este sistema de cavernas se ha establecido y desarrollado el Parque de las Cavernas M Río Camuy, el cual consiste de unas 250 cuerdas de terrenos ubicadas en parte de los municipios de Camuy, Hatillo y Lares.









Este parque es una facilidad recreativa de carácter público, construido y operado por la Administración de Terrenos del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, siendo su principal objetivo el de proveer un lugar para la recreación pasiva, el turismo, la educación y la investigación científica.
Entre los atractivos del Parque se encuentra una amplia y espectacular caverna, que puede ser visitada por el público en general, de una forma cómoda y segura, donde se le brinda la oportunidad de descubrir a los ojos la obra de la naturaleza.






Esta cueva, conocida como la Cueva Clara de Empalme, ha sido desarrollada de manera tal que mantiene inalteradas sus características físicas y geológicas, permitiendo al visitante el disfrute pleno de la naturaleza. Allí podrá observar una amplia galería, con uno de los salones subterráneos de mayor volumen que se conozcan en Puerto Rico, corrientes de agua pura y cristalina; y una serie de formaciones rocosas que retan la imaginación.
Los depósitos de calcita han formado impresionantes concreciones, que con el tiempo se han transformado en estalactitas, colgaduras y coladas.



Estas concreciones en la caverna son el resultado de procesos geoquímicas en los cuales el agua, el anhídrido carbónico, la calcita y la temperatura de la cueva se combinan en lenta pero continua armonía. Sin prisa, desde el techo proviene el carbonato cálcito que el agua que se infiltra por las grietas trae consigo. Las estalactitas presentan siempre un conducto central por el que desciende la gota de agua. Las estalagmitas, que por el contrario, no tienen en su centro orificio alguno, son totalmente macizas, y su fuente de calcita proviene de las estalactitas que se encuentran arriba.

El crecimiento progresivo de una estalactita y su correspondiente estalagmita hará que eventualmente ocurra la fusión de ambas, creándose entonces una columna, algunas de considerable volumen y dimensiones que constituyen verdaderos pilares en la caverna.
Toda esta belleza y esplendor de nuestro mundo subterráneo es a veces transformada por la mano del hombre, quien por desconocimiento, descuido, o intención, abusa de la fragilidad de las concreciones minerales llegando a destruirlas y mutilarlas.


En sólo pocos minutos, puede destruirse lo que a la Naturaleza le ha tomado cientos de miles de años en construir. Conscientes de esta realidad, en Puerto Rico, se ha promulgado desde el 1985 una Ley especial para reglamentar el uso de sus cuevas y cavernas. Esta Ley, conocida como "Ley para la Conservación y Protección de Cuevas, Cavernas o Sumideros de Puerto Rico", constituye una herramienta para tratar de salvaguardar las cuevas y cavernas, sus concreciones y materiales naturales, su fauna, su flora, agua y valores arqueológicos. La espeleología o exploración de las cavernas es una actividad cultivante y constructiva; sin embargo hay que estar muy bien preparado ya que estudiar una cueva requiere destreza y dedicación.

La seguridad del espeleólogo siempre es la prioridad.    Nunca se explora solo.  Siempre se realiza esta tarea en grupos. Cascos, lámparas, calzado y ropa apropiada constituyen el equipo mínimo que debe utilizarse al explorar una cueva.En aquellas cuevas, que como el Sistema de Cavernas del Río Camuy son de magnitud insospechada, que contienen dinámicas corrientes de agua y que presentan obstáculos verticales, es imperativo que el espeleóogo utilice chalecos salvavidas, sogas y equipo mecánico especializado. La más importante misión de¡ espeleólogo, al explorar y estudiar las cuevas y cavernas, es la de proteger y conservar estas cavidades subterráneas, de manera que se garantice la integridad de las formaciones y concreciones de calcita, la fauna, el agua y los yacimientos arqueológicos que allí se encuentran.

No hay comentarios:

Publicar un comentario